"Primero, consigue a las personas correctas en el autobús, después ponlas en los asientos correctos." — Jim Collins, Good to Great.
Esta frase de Jim Collins refleja un principio fundamental que tuve la oportunidad de experimentar en mi vida laboral. Años atrás, contraté a una colaboradora a la que llamaremos Carla. Aunque era joven y no tenía experiencia en el área dental, durante la entrevista noté cualidades en ella que se alineaban perfectamente con la cultura de nuestra empresa: responsabilidad, inteligencia, lógica, y una gran disposición para aprender y trabajar en equipo. Decidí que debía subirla al autobús.
Carla comenzó en una posición de nivel básico como recepcionista y atención al cliente. Al poco tiempo, me di cuenta de que era la persona correcta para nuestro equipo, pero también noté que no estaba en el asiento adecuado. A pesar de ser cordial y amable con los pacientes, no se sentía completamente cómoda trabajando directamente con el público.
Entonces decidí cambiar su rol y asignarla al departamento de cuentas por cobrar. Su principal responsabilidad pasó a ser la gestión de reportes, la aplicación de pagos y el manejo de cuentas. En ese nuevo puesto, Carla no solo demostró ser una colaboradora excelente, sino que su desempeño se volvió extraordinario. Su productividad se duplicó y contribuyó significativamente a la mejora de los procesos en su área. Se convirtió en una pieza clave para el equipo, y su motivación y crecimiento profesional fueron evidentes.
Este cambio fue un recordatorio de que no basta con tener personas talentosas en tu equipo; también es esencial que estén en el rol que mejor potencie su talento y capacidades.
Subir a Carla al autobús y luego encontrar el asiento correcto para ella fue una decisión que cambió su carrera y fortaleció nuestro equipo.
A veces, el éxito no se trata solo de encontrar a la persona adecuada, sino de brindarle el entorno y las responsabilidades que la hagan florecer. Las personas alcanzan su mayor potencial cuando se sienten valoradas y están en el lugar donde pueden desplegar lo mejor de sí mismas.
Como líderes, nuestro desafío es no solo identificar el talento, sino también guiarlo hacia su mejor versión.
Rossemary
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